POR LA CARRETERA

El pasado día 16, Davidcito cumplió un mes de vida.

Desde hace un mes que no quiero salir de la casa para nada.
Me paso las horas parado junto a su cuna al pendiente de cada gesto, esperando a que llore para correr a abrazarlo, darle besitos y jugar con el, sin duda estoy disfrutando mucho de mi cavidcito, ha subido mas de dos kilos y cada vez lo veo más grandote.

Muchos me decían de las malas noches que iba a pasar, que no me la iba a acabar, etc, pero eso es lo que menos cuenta, cuando a media noche te despiertas y lo ves chupando su dedito buscando su alimento, son de las cosas que uno nunca se imagina vivir, vienen incluidas en el paquete de ser papá y sin duda estoy muy contento por eso.

A david le gusta mucho la música, bañarse con agua calientita y dormirse en los brazos de su mamá.
Ya nos reconoce cuando nos ve y sus primeras sonrisas concientes son evidentes.

Vi con nostalgia el cambio de pañalrs de recien nacido-primera etapa, y sentí que su inevitable crecimiento está en marcha, mañana quisiera verlo graduarse en la universidad...pero para eso AFORTUNADAMENTE falta mucho, ahora pueod disfrutarlo, correr a abrazarlo cuando llora, como en este preciso momento en el que estoy escribiendo de el.

Dejo la foto como evidencia de su crecimiento.