ZONA ROJA, ¿UNA NECESIDAD IMPERIOSA?
by Davicho on Nov.22, 2009, under
ZONA ROJA, ¿UNA NECESIDAD IMPERIOSA?
“Porque no concibo que se pueda hacer el amor, más que volando”
Oliverio Girondo
La prostitución, es un fenómeno mundial que crece al parejo de toda sociedad. Se dice de ésta, la profesión más antigua del mundo, al inventarse el comercio, lo primero que tuvo el hombre para vender era a sí mismo, hasta me atrevería a decir que la prostitución dio origen al comercio, ungida por esa necesidad sexual que ha dado pie a la formación de todas las civilizaciones de este planeta.
Hablando de Religión, en el libro mayor, la Biblia, se menciona a una prostituta muy famosa a la que Jesús le lavó los pies; en la literatura, el maestro Sabines nos deleita con su canto “Canonicemos a las Putas” haciendo de ellas mártires dispuestas a darnos placer sin ninguna distinción- motivo por el cual son vejadas, perseguidas y muchas veces asesinadas por una sociedad hipócrita que durante el día se rasga las vestiduras y clausura lupanares pero que en la noche acuden a esos lugares a satisfacer sus más bajas perversiones- el hombre y su doble cara, el animal político y sádico que destruye lo que le alimenta, la máscara y el disfraz, el juego “de no lo acepto pero me es indispensable”.
En la música, no se puede hablar de las prostitutas sin que se nos venga a la mente el Tango, el Candombe, la Milonga, ritmos provenientes de Sudamérica, específicamente Uruguay y Argentina, cabe mencionar que esos países fueron poblados por europeos, en su mayoría hombres solteros que llegaban a esas tierras en busca de un sueño, hombres que como tales también tenían necesidades sexuales y es precisamente en los prostíbulos en donde surgen estos ritmos, en la milonga hay un canto del hombre aquejado por el mal de amores, sólo en la milonga está permitido al hombre llorar, cantar sus penas, el hombre rudo abre su corazón y en los burdeles se muestra tal cual, solitario y con un interminable apetito sexual, el resultado de esas noches bohemias son los tres ritmos antes mencionados, uno no es más que la derivación del otro.
En la canción “Me llaman calle” de Manú Chao el autor le canta a las mujeres con precio, se adentra a la tragedia que las envuelve y va más allá del cuerpo pintarrajeado que vemos en las noches con medias y ligueros, Manú habla de la malegría que acoge a las prostitutas que pasan de ser princesas a mujeres sin futuro en cuestión de minutos, esperando a que un día un hombre bueno les venga a buscar.
Por mencionar una película en donde se maneje la figura de una cortesana, hablaré del film que hace un homenaje a la poesía latinoamericana: “El lado oscuro del Corazón”, en esta cinta, el autor en la búsqueda de su otra mitad recorre centros nocturnos recitando el famoso poema de Oliverio Girondo “Yo no sé y me importa un pito”, al igual que otros poemas de Mario Benedetti y Juan Gelmán, en la cinta, vemos al autor uruguayo fallecido hace unos meses recitando sus poesías en alemán, aburriendo a las prostitutas; mientras el personaje principal tiene suerte con los mismos versos. Al final el autor principal se encuentra al amor de su vida en una prostituta misma que al no obtener del hombre la satisfacción necesaria le recita el siguiente verso del mismo poeta con el que da inicio la película: “Pero eso si y en eso soy totalmente irreductible, no les permito bajo ninguna circunstancia que no sepan volar…” mandándolo a un abismo interminable.
Mención aparte merecen las cintas del cine mexicano que son todo un género, me refiero al llamado Cine de Ficheras, que retrata a la sociedad mexicana de todos los tiempos con problemas cotidianos y personajes chuscos. En el cine de ficheras, lo elemental es el poderío del macho mexicano, hombre casado que se las puede todas, con un miserable sueldo que obtiene ya sea de plomero, vendedor de gas, albañil, etc. Sostiene varios hogares y hasta se da el lujo de acudir a prostíbulos, bailar mambo o danzón y ser el galán, mientras una serie de cosas chuscas ocurren a su alrededor.
En Mérida, existió una zona de tolerancia en las décadas de los setentas, ¿Es necesario abrir una actualmente?
¿Por qué?
· Para tener un control de cuantas personas se dedican a esta profesión entre hombres y mujeres. Actualmente es imposible tener un censo de las prostitutas y/o travestis que existen en la ciudad, así como el estado de salud que guardan, al haber un lugar en específico en donde se les pueda localizar se puede levantar un estudio y con esto tener a la mano la siguiente información: a) cuantas personas se dedican a ello , b)edad, c) lugar de origen, d) estado de salud, entre otros.
· Para emitir bandos de gobierno y leyes al respecto eficientes, si bien en nuestro código penal está prohibida el lenocinio o trata de personas, nunca se prohíbe la prostitución como tal, la pena va según el código penal vigente: a quien explote el cuerpo de otra persona por medio del comercio carnal, se mantenga de este comercio u obtenga de él un lucro cualquiera (código penal de Yucatán). Como vemos, nunca habla de la persona que por sí misma decide dedicarse a este oficio sin importar las causas que la lleven a ello. Si bien se emiten bandos de gobierno en Mérida en donde se prohíbe a las meseras alternar con los clientes, así como el horario extemporáneo de bebidas embriagantes, lo que se hace es dar paliativos y no erradicar el dolor, pues de facto los antros se disfrazan bajo el seudónimo de “Restaurante bar” las mujeres no solo alternan con los clientes sino que les bailan y se van con ellos bajo la mirada cómplice del inspector corrupto que se lleva su buena tajada de este negocio; Y cuando las rabietas de la pulcra sociedad enfocaron sus pilas a “acabar” con los tugurios, estos se expandieron hacia más allá del periférico, fuera de la jurisdicción de Mérida, a las cercanías de Kanasín, esta represión dio origen a la llamada “Ruta Put”
Al haber un lugar destinado específicamente para estos menesteres se pueden emitir leyes que prohíban la prostitución fuera de esta zona, con lo que mermaría la exhibición de suripantas y travestis en las avenidas Itzaes y Canek.
· Para evitar que el narcotráfico y la prostitución converjan podría haber en la zona de tolerancia un contingente de policías y perros que revisen la entrada y salida de la gente, estoy seguro que sería una estrategia plausible y eficiente.
· Para evitar accidentes de tránsito. Obligar a los dueños de los antros que den el servicio de chofer designado, para que los que salen de esos lugares ahogados de borrachos puedan llegar a sus hogares sanos y salvos y a la vez protejan a la ciudadanía que en la mayoría de los accidentes de tránsito son afectados por gente ebria y que ahora sí, el homicidio ocasionado por un conductor borracho, sea tomado como doloso o que al menos para salir bajo fianza primero pague la reparación del daño, este es motivo de otro artículo que presentaré más adelante.
“Oh puta amiga, amante, amada, recodo de este día de siempre, te reconozco, te canonizo a un lado de los hipócritas y los perversos, te doy todo mi dinero, te corono con hojas de yerba y me dispongo a aprender de ti todo el tiempo (Jaime Sabines)
Como he mencionado hasta el momento, la prostitución estará siempre presente en toda sociedad, sea abierta o clandestinamente; en países importantes del primer mundo como Japón y Holanda, la prostitución ha pasado a ser algo característico del país, tienen una reglamentación adecuada y se han tomado las medidas necesarias para adaptarlas a la sociedad.
Es necesario que en nuestro Estado, haya una zona de tolerancia, es imperioso, no se puede pasar por alto este tema, es de urgente necesidad, por los problemas de salud, drogadicción e imagen pública que engloba la prostitución, hay que reconocer las necesidades económicas y sexuales de la población, que al fin y al cabo son también parte de los derechos humanos, se olvida de ellos al hablar del tema, lo justo es que si ha existido en todos los tiempos, dejemos a un lado nuestra visión puritana y hagamos algo por regular el meretricio, en Quintana Roo y Campeche existen desde hace mucho, no podemos quedarnos atrás.
No hemos aprendido la lección de la parábola narrada en la Biblia, seguimos juzgando a una parte esencial de la sociedad, un mal necesario, seguimos aventando piedras cada día sin estar libres de pecado, no pido como el poeta Sabines que canonicemos a las putas, solo que se les dé un espacio más justo y más digno, porque se lo merecen y porque nosotros también nos lo merecemos.
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Acerca de mí
- Davicho
- Yo soy un hombre sincero, de donde crece la palma y antes de morirme quiero, echar mis versos del alma.
8:10 a.m.
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